Por Ivette Estrada
Los mitos del amor romántico son ideas y creencias que muchas veces normalizan la violencia. Antifaces que nos alejan de la realidad y nos atan a imaginarios irreales, espejismos que aniquilan, credos que nos orillan a tolerar el abuso.
Angélica Contreras, vocera de Mujeres vivas y libres, asegura que detrás de cada mito romántico subyace un peligro potencial. Ejemplifica:
La creencia de que el amor es eterno genera la idea de que el matrimonio es eterno y se debe aguantar todo para preservarlo. La extendida idea de que sólo debe existir un amor posiciona le divorcio como una realidad atávica y deleznable.
Por otra parte, los roles de género, limitan la expresión sexual de las mujeres so pena de tildarlas de frívolas y casquivanas. Incluso la calificación de “facilita” es preludio de agresiones y violencia.
Entre otros mitos perniciosos del romance está la idea de que el amor implica sufrimiento. Entonces se deben aguantar conductas nocivas como infidelidades y celos.
Angélica Contreras, activista y experta en derechos digitales, menciona que otro de los malsanos mitos “románticos” es creer en que somos “medias naranjas” y debemos tener una relación con alguien para “no terminar solas”. La pareja es la que nos proporciona valía y sentido de vida.
Según la comunicóloga, “reconocer y desentrañar los mitos respecto al amor nos permitirá tener relaciones más libres y verdaderas con nosotros y los otros”.
La identificación de una relación tóxica, por otra parte, no es una tarea sencilla, ya que una de sus características es, precisamente, la dependencia emocional. Ésta obstaculiza la percepción del problema.
Algunas de las señales de alarma son el control excesivo, falta de comunicación o comunicación agresiva, manipulación emocional y aislamiento Social.
Las expectativas sociales del amor romántico, por otra parte, pueden generar idealizaciones irreales y llevar a rupturas impulsivas.
Así, se deben evitar conceptos inalcanzables del amor, que sólo conducen a la frustración y malestar emocional dice el psicólogo español Pedro Neira, quien subraya que las parejas pueden construir relaciones sólidas, basadas en la comprensión mutua, el respeto y el crecimiento compartido.
Según el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), en México, la violencia más frecuente y severa que viven las mujeres se da en las relaciones de pareja, ya sea por unión, matrimonio o noviazgo.
La violencia de la pareja ocurre con mayor frecuencia entre las mujeres que están o estuvieron casadas o unidas. Se estima que por cada 100 mujeres de 15 años y más que tuvieron pareja o esposo, 42 de las casadas y 59 de las separadas, divorciadas y viudas, vivieron situaciones de violencia emocional, económica, física o sexual durante su actual o última relación.
Por ello, debe considerarse que hay mitos que obnubilan y destruyen.